lunes, 17 de octubre de 2011

Siento interrumpir los Consejos para Escribir, pero he tenido un comienzo de semana... curioso. Hay quien diría malo, pero a mí no me lo parece tanto, ha sido entretenido. Evidentemente si hubiese tenido otro desenlace habría sido malo, pero... en fin, que ahora os lo cuento.

Todo ha empezado con dos decisiones que he tomado, variando así mi rutina habitual. Primero, me he sentado en el segundo sitio y no el tercero como suelo en el autobús. Segundo, no he sacado el libro que estoy leyendo y me he limitado a mirar al horizonte mientras escuchaba música.
Esto ha provocado que estuviese mirando al lugar indicado en el momento indicado, y pillase al conductor de autobús bebiendo de una misteriosa botella envuelta en una bolsa. Y me pusiese a rezar por que fuera café.

Al principio no ha sido para tanto. Incluso he tenido que aguantar la risa un rato, ya que otro pasajero había visto lo mismo que yo y se revolvía inquieto en el asiento con un paquete de galletas María en la mano. Sí, lo sé, yo también empecé a sospechar en este punto que a lo mejor era un sueño lúcido, pero no.

En cualquier caso, y por si acaso, me quedé vigilando al conductor. Bostezaba, se frotaba los ojos. Nada muy terrible a las ocho de la mañana. Hasta que empezó a CABECEAR. Con un ojo aún puesto en un retrovisor, miré a mi compañero de penurias A.K.A. Señor Galletas a partir de ahora, que estaba mordiendo el cable de los auriculares de puro nerviosismo.
Para colmo, esta mañana había atasco, y el viaje no parecía terminar nunca. Creo que fue en este punto cuando me empecé a preocupar. Incluso intenté ponerme el cinturón, pero por supuesto no funcionaba. Mientras tanto el conductor hinchaba los carrillos y se inclinaba hacia adelante, como si estuviese teniendo arcadas.
El atasco ya mencionado y la lentitud que esto conllevaba tranquilizó al Señor Galletas, o eso parecía. Cambió las galletas por el móvil, y yo me pregunté si estaría llamando a sus seres queridos para despedirse. No, no, yo no lo hice. Me contenté con enviar un mensaje a uno de ellos.

Mi desbocada mente ya elucubraba qué decir a los del 112, qué hacer si el conductor se dormía o si terminábamos por chocaros, y mi mp3, solidario él y puesto en aleatorio, se obstinaba en ponerme una y otra vez “Contra el Viento”. Creo que el conductor se dio cuenta que el Señor Galletas y yo le mirábamos, porque nos lanzaba miradas vidriosas reflejadas en el espejo.

Por fin llegamos a nuestro destino. Me sentí tentada de preguntar qué había realmente en la botella de la bolsa, pero llegaba tarde. Y un “jje pashha, como eshtás” del conductor dedicado a uno de sus compañeros cuasi-confirmó mis sospechas. El señor Galletas se apresuró a bajar del autobús, no sé si por prisa o por miedo, y yo, con una sonrisita en la cara a caballo entre el alivio y la hilaridad, no fui tan rápida.

Todavía es lunes, y si empezamos así, me pregunto qué será del resto de mi semana. ¡Adrenalina y diversión a mogollón!

Os dejo con la canción que mi mp3 repetía, que es muy bonita :___c

martes, 4 de octubre de 2011

Consejos para escribir III.

He tenido el blog cerrado por vacaciones. Y tengo unas vacaciones muy largas, qué pasa XD. En fin, que continuamos con mis consejillos para escribir, y hoy toca el que probablemente sea mi tema favorito, al que pongo tanto empeño y tesón que pienso dedicarle dos posts.
Al lío.

Antes de empezar a escribir: Personajes 1 (Los buenos).

Como acabo de decir, me encanta crear personajes. Por eso mi master de rol vive acosado con mis constantes y absurdas ideas, pero esa es otra historia. La cuestión es, ¿por qué me gustan tanto? Pues porque sin un buen personaje, la historia se va al garete. Al menos para una servidora. Supongo que es cuestión de gustos. Pero Harry Potter sin Snape perdería muchísimo.

A lo que vamos. Podemos crear nuestros personajes cuando nos apetezca. Incluso antes de decidir la trama. A veces, aparece primero alguien en nuestra cabeza y este alguien nos cuenta su historia. Otras veces decidimos primero el mundo y después pergeñamos un habitante ad hoc. Y por último, podemos idear primero la trama y después buscar un personaje adecuado para ella. Aunque casi siempre, todo aparece a la vez.

Dicho esto, os voy a poner unos pocos arquetipos en los que basaros, clasificados por los roles que desempeñan normalmente en los libros. Me temo que lo que más he leído/escrito en mi vida es fantasía, así que admito que estos arquetipos van a ser más acordes con ese estilo que con cualquier otro. Haré lo que pueda, de todas formas.

El chico bueno.

Harry Potter. O Frodo. O Cíclope y Spiderman, para los aficionados al cómic. O la gran mayoría de los protagonistas masculinos de las películas de Disney, XD. El chico bueno es un protagonista fácil de llevar, ya que sus decisiones y reacciones son, en la mayoría de casos, evidentes. No obstante, esto es también un problema para el escritor, ya que crear un personaje encajado en este arquetipo que no resulte aburrido/estúpido/Flanders no es tan sencillo.

El chico bueno tiene muchas caras. Así, a voz de pronto, se me ocurre que podríamos hacer de él un joven científico introvertido y deseoso de utilizar su intelecto para el bien, pero también un valeroso guerrero con un estricto código de honor que le impela a ayudar siempre al más débil. Si queremos evitar que el científico se convierta en el profesor Frink o el guerrero en el Capitán Hammer (véase la miniserie del Dr. Horrible), tendremos que ponerles una serie de complicaciones y objetivos, filias y fobias. El hecho de que el guerrero sea honorable no significa que no le puedan perder las faldas, y que sea puro músculo no le exime de ser un gran estratega. Esto es aplicable a todos los casos, evidentemente. Estamos hablando de dar profundidad a los personajes, de ser originales y crear algo único y vuestro, y no un Aragorn dos.

Buscamos la originalidad. Ya que empiezo con los protagonistas, voy a comentar algo que siempre me ha hecho mucha gracia, y es que parece que ser protagonista te concede la orfandad automáticamente. Comentaba cierto trasgo que de todos sus jugadores de rol, sólo uno tiene padre. Seis personajes para un progenitor. Parece que nadie pueda tener una relación sana y normal con una familia normal y unos padres que se quieran.

Volviendo al arquetipo “chico bueno”, otra de las cosas que tenemos que definir muy bien es su moralidad. Preguntarnos cosas como si mataría a alguien por un bien mayor. Y de todos los dilemas que nos planteemos, añadir algunos en nuestra historia. Que sufra, que se debata. No lo convirtamos, por el mero hecho de ser alguien bueno, en un robot que siempre toma la decisión que se supone que debe tomar. No deja de ser una persona.

Llevo todo el rato hablando en masculino, pero también es aplicable a mujeres, como es obvio. La chica buena generalmente derrocha dulzura y simpatía, es la “mamá” de todos, a todos cuida y a todos quiere. El que tenga una personalidad afable no significa, en ningún caso, que no pueda ser fuerte. Eowyn es un ejemplo magnífico de esto. Arwen es un culo, en cambio.

El antihéroe.

Mucho ojo, no confundir con el antagonista, que de los malos nos encargamos otro día.Por ejemplo, el capitán Alatriste en los primeros libros. No puedo evitar irme a los cómics. Lobezno. En general, dícese del tipo duro que bien puede ser un malo redimido, bien una persona hosca pero de buen corazón, o incluso ese que pese a no compartir los ideales y objetivos del héroe, le acompaña por un motivo o por otro. Los antihéroes acostumbran a evolucionar de un modo más evidente que otros personajes, ya que su actitud de “bueno-pero-no-del-todo” da lugar a una mayor libertad de actuación. Puedes hacer que tenga unos valores a lo samurai pero que no dude a la hora de matar a alguien, a diferencia del héroe.
Muchas fangirls y escritoras (suelen ser escritoras, lo siento) poco experimentadas, hacen del antihéroe una estatua de marfil increíblemente sexy que no hace otra cosa en su vida que ser taciturno y “tratar mal” a la protagonista femenina. Muchas veces va acompañado de una guitarra o una bonita voz (ajemajemKIRTASHajemajem). Por favor, no. Queremos alguien creíble, no a Kurt Cobain elevado a la categoría de dios griego.

En cuanto a la antiheroína, cuando la hay, tiene más carácter que la chica buena, y más de una vez es un poco zorrón. Emma Frost (siento las miles de referencias a los cómics ^^U). Insisto en esto, porque es muy importante, queremos originalidad. Hablo de los arquetipos porque es lo mejor para situar a un escritor novel (ja, ja, como si yo no lo fuera) pero no tiene por qué ser así. ¿Y si nuestra chica buena fuese mucho más masculina de lo que todos esperan y la antiheroína no soportase el contacto físico? Por ejemplo.

Lo que sí es cierto es que los antihéroes tienen que tener más carácter que otros personajes, es su naturaleza, su rol en el libro, si no no serían antihéroes. Pero la personalidad puede ser tan extraña y única como nos parezca bien.

El personaje secundario.

Mi favorito de todos ellos. También conocido como “sidekick”. Samsagaz Gamyi, Ron Weasley. Domovoi Mayordomo en la saga de Artemis Fowl, aunque este es un sidekick de lo menos habitual. John Watson o Íñigo, el compañero de Alatriste, ambos narradores de sus respectivas novelas.

Para construir a este personaje tienes toda la libertad del mundo y más. Puede tener carácter, puede no tenerlo; puede ser bueno, puede no serlo tanto; puede ser simpático o no... lo que te de la gana. Muchas veces es el factor cómico, pero otras es el amigo, consejero y protector del protagonista. O al revés, el protagonista es el consejero del personaje secundario. En muchas novelas, tristemente, su destino es la muerte, aunque a veces se les resucita milagrosamente (especialmente en las sagas, adivinad por qué).

Se puede usar como recurso de la trama. Por ejemplo, si estamos escribiendo una novela futurista sobre un detective, el personaje secundario podría ser su amigo el hacker que vive encerrado en un bunker y le va informando sobre el tema que el protagonista tiene entre manos.

No tengo mucho más que decir acerca de éste, ya que dada su versatilidad, podéis hacer lo que queráis con él. Eso sí, tratadlo bien, dadle su complejidad y profundidad. Si hacéis del héroe la persona más complicada del mundo pero el personaje secundario viene a ser Tabla, os habréis cargado vuestro propio trabajo. Que no diga “vale” a todo lo que le dice su compañero, que tenga ideas propias, que rehúse a meterse en la cueva del dragón porque tema no salir, qué se yo. Que piense. Me piden por ahí que haga referencia a la República de Platón, con Glaucón asintiendo cual muñequito de esos que se ponen en el salpicadero del coche a todo lo que decía Sócrates.

El sabio.

También conocido como Deus Ex Machina. Gandalf, clarísimamente. Me refiero a ese personaje que no siempre está ahí, que aparece sólo cuando se le necesita y a veces ni eso. Que sabe mucho pero dice poco, y sus razones tendrá. Otro de los Grandes Recursos de la Trama, pero ojo, no podemos abusar. No podemos recurrir al sabio cada dos por tres, el héroe y compañía tienen que superar los obstáculos por sí mismos siempre que puedan.

Oh, y el sabio no tiene por qué estar siempre de su lado. Se me ocurre, basándome en cierto villano pero no de cierta partida de rol, que el sabio podría empezar como antagonista. Pongamos que hay un poderoso mago en nuestra historia, llamado Gadene, que ha llegado a conocer un hecho importantísimo y terrible que va a pasar en el futuro. No puede hablar de él, porque interferiría en el transcurso de los hechos de forma imprevisible, y él, por el motivo que sea, no puede arreglarlo, pero siente la necesidad de hacer algo. Así que, saliéndose de su papel de observador, decide actuar. Envuelto en un halo de misterio, y sin decirles nunca nada, se dedica la mayor parte de la historia a presentarles retos de todo tipo, cada vez más difíciles, con el objetivo de entrenarles para lo que va a llegar. Los personajes llegan a odiarle, hartos de estar constantemente en peligro por culpa de Gadene, pero el futuro llega y de repente se hace la luz. Descubren por qué el mago ha estado poniéndoles a prueba constantemente y se dan cuenta de que gracias a él están preparados para hacer frente a lo que está pasando.
Lo pongo en el apartado de los buenos porque aún puteando al máximo a los protagonistas, no deja de querer una suerte de bien mayor.

Otra cosa. Aunque esté hablando de individuos, podéis hacer colectivos. Un grupo puede tener dos chicos buenos, un antihéroe y cuatro personajes secundarios. Por ejemplo. Ah, y un mismo personaje no tiene por qué ser siempre el protagonista, puede ir cambiando... aunque si vamos a hacer eso, tenemos que ser bastante habilidosos.

Me enrollo cual veterano profesor de la universidad, así que, y como lo prometido es deuda, sólo os hablaré de una cosa más: Las Mary Sues.

Una Mary Sue (o Gary Stu, en su versión masculina), viene a ser una personificación del autor/a (casi siempre autora) que toma el papel protagonista en la trama. Mary Sue es siempre perfecta. Es dulce, amable, inteligente, preciosa, buena persona... Un bombón, vamos. Y todos los chicos (todos guapos) quieren salir con ella. A veces, en un esfuerzo sin precedentes, se intenta poner un defecto a la Mary Sue: es torpe. Se tropieza, tira las cosas, con erótico resultado. Por ejemplo:

“El malvado profesor Roderick Andom me había castigado injustamente, por lo que caminaba por los pasillos llevando un cubo de agua. De repente, tropecé, el cubo salió volando y me empapó de arriba a abajo. ¡Qué torpe! Y qué mala suerte la mía, que me encontré con Thomas I. Obueno. Me cubrí como pude la camisa empapada que empezaba a transparentar, terriblemente avergonzada...”

Sí. Siempre está escrito en primera persona. Si queréis leer más sobre Mary Sue, entrad en cualquier página de fan fictions, especialmente os de Harry Potter. O leed Crepúsculo. Jeh.

Y bueno, vale, he mentido. Una cosa más. Pequeña lista de NO para hacer personajes “buenos” decentes:

NO creéis personajes perfectos. Nadie quiere leer eso, conseguiréis que los odien. Que contesten mal, o que sean un poco lentos de entendederas, o que sean alcohólicos, qué se yo. Que maten gatitos. Lo que sea, algo, pero que tengan defectos.

NO les hagáis superpoderosos. Un protagonista que Todo lo Puede es aburrido, muy, muy, muy aburrido. Es mejor putear a vuestros queridos personajes como si no hubiera un mañana que hacer que venzan a un dragón con la punta de los dedos.

NO dejéis que sean planos. Pensad objetivos, pasado, filias y fobias. Ya lo he dicho antes, lo sé, pero lo repetiré hasta la saciedad. Y a todos por igual, a no ser que sean meros extras.

NO hagáis a todos los personajes iguales. Especialmente si escribís varias historias distintas. Yo entiendo que un día creéis a alguien tan genial que queráis clonarlo en todas partes, pero hay que evolucionar.

NO permitáis incoherencias. Si nuestro personaje tiene una personalidad marcada, sabremos perfectamente cómo va a actuar en un momento u otro, y el lector también. Y al lector no le hará ninguna gracia que el Muy Honorable Guerrero que hemos creado huya como una rata dejando a alguien en peligro porque si se queda seguro que la espicha. Si llegamos a ese punto, o bien muere por lo que cree, o bien (si cuela y queda bien) le salvamos el culo milagrosamente. O revisamos y modificamos toda la historia para evitar que se llegue a eso.

Y bueno, creo que ya está. Siento el tochopost. Otro día más y puede que mejor.

Próxima entrega: Antes de empezar a escribir: Personajes 2 (los malos).

La canción es magnífica, y para la próxima entrega tengo una mejor...

domingo, 24 de julio de 2011

Consejos para escribir II.

He dormido aproximadamente cinco horas, pero dije que lo haría y lo haré. A ver si me autoimpongo un poco de disciplina a la hora de escribir, leñes.

Ayer os hablaba de las generalidades a tener en cuenta antes de empezar a escribir. Hoy seguiremos con la fase previa a escribir, pero adentrándonos en los detalles. Vamos allá...

Antes de empezar a escribir: Escenarios.

Como decía la señorita Isiriel ayer en un comentario, tener claro en qué ambiente nos movemos es importantísimo. Volviendo a lo que dije a ayer, tenemos que tener muy presente el tema que hemos escogido para saber qué nos urge decidir sobre nuestro escenario. Voy a poner tres casos: El relato histórico, el relato de ciencia ficción y el relato fantástico.

1. El relato histórico.

Empiezo por aquí porque es uno de los más obvios. En un principio iba a añadir el relato actual como ejemplo, pero, salvando las distancias, los consejos que se den para este apartado también valdrán para el relato actual.
Para crear un escenario histórico tenemos que investigar, investigar e investigar. Una vez hayamos escogido fecha y lugar(es), toca meter las narices hasta el fondo en todos los libros que encontremos. Si no acabaremos con anacronismos que resultarán desagradables al lector y harán de nuestra historia un fracaso.

Economía del momento, situación política, número de avances tecnológicos... Aunque no sea relevante en nuestra historia, tenemos que saberlo. Puede que a nuestros personajes les importe un comino que los alemanes hayan invadido Polonia porque están demasiado ocupados sufriendo las consecuencias de la Guerra Civil, pero seguramente oigan algo al respecto y quizá incluso lo comenten. Seguramente en la radio se mencione lo del pacto de Hendaya, e incluirlo en nuestro relato ayuda a meter al lector en contexto.

La forma de hablar también es importante (recordemos los "voto a tal" del Capitán Alatriste), las vestiduras, la comida, las tradiciones... Ejemplo facilito: En una historia del tipo medieval las mujeres serán más bien sumisas y no demasiado letradas. En el caso de los campesinos, tanto hombres como mujeres eran analfabetos, y en el caso de los nobles, no se crearon escuelas mixtas hasta el siglo XIII. No se les tratará muy bien (hubo una época en la que se discutía si tenían alma o no), más bien como objetos, y rara vez serán las mujeres rebeldes que nos gustaría que fueran. Cosas, por ejemplo, como que el matrimonio no se consideró sacramento hasta el siglo XII son interesantes, ya que antes se permitía repudiar a la mujer y algo similar al divorcio, mientras que después de eso no.

Recomiendo a Reverte en cuanto a inspiración para crear escenarios históricos, lo que me recuerda un último consejo: Igual que en sus libros aparecen Quevedo y el Conde Duque de Olivares, está bien meter un personaje que realmente existió para dar veracidad a la novela. Con cuidado, claro está.

2. El relato fantástico.

Ahora vamos con lo duro. Con "relato fantástico" me refiero a los que incluyen cosas como magia y seres sobrenaturales. Los escenarios de este tipo de relatos dejan casi todo a la imaginación, lo que no quiere decir que la investigación sea prescindible, que no lo es. Podemos empaparnos de la mitología ya existente y escribir algo acorde con ella o crear nuestras propias razas y criaturas fantásticas; pero haciendo esto último también tendremos que recurrir a la biblioteca más de una vez.

Para empezar, debemos decidir si lo vamos a ambientar en nuestro mundo o vamos a crear un lugar completamente nuevo.

Si lo ambientamos en nuestro mundo, habrá que escoger una época y uno o varios emplazamientos. Aunque el número de datos que recopilemos depende de lo minuciosos que queramos ser con las descripciones del escenario, es obligatorio tener una base para evitar incoherencias. Cosas como la situación política de un lugar en una determinada fecha, el clima de ese lugar, los inventos existentes y no existentes del momento... son fundamentales. Incluso si queremos que se desarrolle en la actualidad, hay que indagar un poco.

Si nos inventamos otro lugar, hay que precisar absolutamente todo. Los relatos creíbles se basan en su nivel de detalle. No basta sólo con decidir si estamos en un país costero o montañoso, o si son hayas o chopos lo que crece en sus bosques. Inventar un mundo de cero es una tarea ardua, hace falta tener no sólo enormes cantidades de imaginación sino también ganas de trabajar duro.
Aunque suene absurdo, la realidad es nuestra mejor aliada a la hora de escribir ficción. Pongamos que estamos creando un país,y queremos establecer un sistema político en el mismo. Como nuestro país es completamente alternativo, no vamos a instaurar un sistema que haya existido en la realidad. No obstante, la mayoría de nosotros no tenemos demasiada idea sobre el funcionamiento de los mecanismos políticos o legales, por lo que aunque no vayamos a copiar la idea de monarquía, sí que estará bien saber cosas sobre la misma y sobre otros sistemas, para crear algo congruente.
Este es un ejemplo muy extremo porque normalmente apenas se dan datos del sistema político, pero espero que la esencia del mensaje se haya entendido.
Tendremos que establecer la arquitectura del lugar, el carácter de sus gentes, la flora y la fauna alrededor, sus relaciones con pueblos o países lindantes, su política, leyes y economía... todo aquello que se nos ocurra que podríamos necesitar en cualquier momento habrá de ser apuntado. Probablemente al final no usemos todo, pero en este caso, más vale que sobre siempre.

Otra cosa elemental en el relato fantástico es decidir el papel de la magia, tanto en mundos inventados como en nuestro mundo. ¿Está reservada a unos pocos o cualquiera tiene el potencial para manejarla? ¿Supone algún sacrificio importante emplearla? ¿Hay algo parecido a un gremio de magos, o los magos son seres solitarios que aprenden a manejar sus poderes por su cuenta? En caso de que el escenario sea imaginado, ¿está bien vista la magia o debe ocultarse?
Y por supuesto, lo mismo ocurre con las criaturas y razas fantásticas. Además de elegir cuáles van a existir y cuáles no, tendremos que decidir su papel. En nuestra España actual, a lo mejor existen los elfos tolkenianos y no se ocultan, sencillamente se operan las orejas. O quizá nos encontremos en la misteriosa tierra de Litanaih, donde las hadas son repudiadas y asesinadas si son vistas.

También es bueno decidir una Historia (y lo pongo con mayúsculas porque me refiero a unos hechos relevantes ocurridos a lo largo del tiempo) tanto en mundo real como en mundo inventado. Sí, sí, en mundo real también. ¿O no tenían Harry Potter y compañía una asignatura llamada Historia de la Magia? Pues a eso me refiero.
Temas como religiones, mitologías y demás son divertidas de pensar, así como los idiomas, aunque no imprescindibles. Eso sí, yo por lo menos pienso que un personaje que diga "por el amor de Rivyr" (o cualquier deidad que os inventéis) gana mucho con respecto a uno que diga "por el amor de Dios".

Si queréis algún autor en quien basaros en cuanto a escenarios fantásticos, la respuesta es evidente: Tolkien. No tengo que explicar por qué, ¿verdad?

3. El relato de ciencia ficción.

El proceso de creación del escenario de ciencia ficción se sitúa a medio camino entre la investigación y la imaginación. Si bien nos tendremos que inventar los robots, naves espaciales, extraterrestres, armas o lo que sea que queramos añadir a nuestra historia, no podemos crearlo de cero. El buen relato de ciencia ficción resulta sacrificado porque hay que saber mucho para concebir algo verosímil.

Lo cierto es que si lo pensamos, el proceso de construcción de escenarios de la ciencia ficción es muy similar al del relato fantástico, pero con una salvedad muy notoria: En lugar de "magia" tenemos "ciencia avanzada". Sin embargo, con los dos puedes inventarte casi cualquier cosa. Por este motivo, gran parte de lo que he dicho en el apartado anterior es aplicable a este.

Sin embargo, en un buen relato de ciencia ficción necesitas cierta coherencia. De ahí la investigación de la que hablaba antes. Puedes inventar la máquina más rara del mundo, pero tarde o temprano tendrás que explicar cómo es posible su existencia. Al fin y al cabo, estamos hablando de ciencia. El lector tiene que poder creerse lo que le estás diciendo, tienes que convencerle de que eso va a existir algún día.

Otra de las diferencias es la cantidad de rareza que puede haber en fantasía y en ciencia ficción. Mientras que en la fantasía llega un punto en el que el lector, por algún motivo, repudia a los seres que son demasiado extraños, en la ciencia ficción no es así. Si nos fijamos, la grandísima mayoría de razas fantásticas (no digo todas pero ahora no me viene ninguna a la cabeza que se escape de la norma) tienen rasgos humanoides. Por otro lado, una criatura extraterrestre puede tener veintiocho patas, un ojo delante y otro detrás, escamas y plumas que a todo el mundo le parecerá bien. Y es que seamos sinceros: La idea de que en un planeta completamente distinto al nuestro haya surgido una raza idéntica a nosotros es ridícula.

En general, la ciencia ficción permite al escritor alejarse más de la norma, pero requiere un arduo trabajo investigando. La fantasía teóricamente debería permitirnos la misma libertad, pero la cruda realidad no es así. Así, los libros del primer género que triunfan son los que se salen de la norma, mientras que la fantasía normalmente sigue un patrón similar.
Desde aquí yo os animo a que rompáis ese patrón, que abandonéis los elfos de ojos azules y cabello rubio e innovéis todo lo que podáis.

Pero en fin, volvamos a los escenarios. Como antes, toca decidir si queremos un universo alternativo o el nuestro, con todas las consecuencias ya descritas. Asimismo, hay que elegir si queremos una historia futurista o actual. Ver hasta qué punto ha avanzado la ciencia, y qué papel tiene en la vida de las personas.

Para este tipo de relatos, Michael Crichton como increíble aspiradora de datos y Asimov como maestro de la ciencia ficción.

Y bueno, después de todo el día intentando redactar esto, lo dejo ya. Ni lo reviso, que estoy cansadísima. Siento que haya sido un tochopost (ahora entiendo por qué se escriben libros enteros sobre cómo escribir) y espero que os sea útil.

¡Canción! Vamos a ponernos de blues.



EDIT: Se me olvidó ponerlo anoche. Este post ha sido escrito con la ayuda del señor trasgo, a.k.a. Rekhar, que aportó sus vastos conocimientos en materia de ciencia ficción.


sábado, 23 de julio de 2011

Consejos para escribir I.

He vuelto a la escritura en formato novela. Se me da mal, además nunca las acabo, pero sigo intentándolo. Claro que ahora tengo la ayuda de cierto trasgo que corrige mis bocetos. Y entre ambos, algo vamos haciendo.

El caso es que como tengo esto más abandonado que el trastero de un Rodríguez, he pensado que podría compartir algo de lo poco que he aprendido tras tantos años de práctica y lectura incesante. Como siempre, si alguien no está de acuerdo con mis consejos, que deje un comentario y será tenido en cuenta. Comenzamos.

Antes de empezar a escribir: Generalidades.

Uno de los errores más comunes entre los escritores noveles (yo incluida) es comenzar a escribir sin una idea sólida, esperando que todo surja según el teclado se pulsa o el bolígrafo se mueve. Es lo que Unamuno llamaba "escritura vivípara". Empezamos por la primera línea y no paramos de escribir hasta la última, sin mirar atrás. Desgraciadamente, ese tipo de escritura -si queremos que salga bien- está reservada a unos pocos genios.
El resto tenemos que recurrir a la "escritura ovípara", esto es, planificar nuestras historias antes de escribirlas. Si no, lo más probable es que o no lo terminemos por quedarnos atascados, o que nos quede un truño, hablando pronto y mal.

Tampoco es necesario planificar hasta el último detalle. Es bueno dejar huecos libres para esos momentos de inspiración divina en los que nos llegan ideas dignas de Shakespeare, Verne, Asimov o Gaiman. Lo que más os guste. La idea es hacer un esquema básico que nos sirva de guía para no quedarnos atascados y mantener un mínimo de coherencia.

Lo primero obviamente es decidir el tema a tratar. Podemos querer escribir una trepidante historia de acción ambientada en el futuro o un drama romántico actual. O a lo mejor describir la vida cotidiana de personas residentes en un universo alternativo donde las hormigas dominan el planeta.

Aquí se decide también el tono: ¿Queremos que sea utópico o distópico? ¿Realista o fantástico? ¿Serio o humorístico? Pueden parecer perogrulladas, pero es algo realmente importante. Si no comenzaremos nuestra historia en clave de humor sobre las hormigas que dominaban el Planeta Tierra y lo terminaremos con dos valientes héroes enamorados salvando el mundo, muriendo uno de ellos en el intento trágicamente. Sí, a mí también me suena ridículo. Pero estas cosas pasan cuando escribes "según te sale".

Debemos escoger si va a estar narrado en primera o tercera persona (o en segunda, si es un libro de esos de "escoge tu propia aventura").
La primera persona es para un relato más personal, que refleje las sensaciones e impresiones de un solo personaje. Se requiere crear al menos un personaje muy elaborado para este tipo de perspectiva, ya que tendremos que cuidarnos mucho de lo que dice y lo que no. No tiene sentido que alguien poco empático se de cuenta de las intenciones que tan bien ocultaba esa otra misteriosa persona, o que una persona poco inteligente comprenda los enrevesados acertijos del viejecito al que fueron a visitar. Las descripciones tendrán que ser acordes con la personalidad (si alguien es depresivo utilizará adjetivos con connotaciones negativas, por ejemplo). Además, no podremos escribir nada que nuestro narrador no haya podido averiguar, por lo que cuando alguien desaparece de escena no sabremos qué hace o qué le ocurre hasta que vuelva y lo cuente.
La tercera persona hace las cosas mucho más fáciles, pero menos personales. Permiten la omnisciencia, es decir, que el narrador sepa todo lo que ocurre y pueda narrarlo. Las descripciones serán libres y podremos escoger qué decimos y qué no en función de la historia y no de lo que sepa o no un personaje.

¿Mi consejo? Si no quieres comerte mucho la cabeza, tercera persona. Si quieres un auténtico reto, primera.

Posteriormente vienen los detalles: Escenario, personajes y trama. Pero como eso necesita bastante espacio y este post ya me ha quedado largo, os lo cuento mañana.

Siguiente entrega: Escenarios.

Y canción, por supuesto. Que no tiene nada que ver, pero me gusta :D

martes, 19 de julio de 2011

Otro vídeo para rellenar.

Maldito verano, que drenas mis ganas de actualizar el blog. Y eso que tengo una gran idea en mente, pero también una enorme vaguería encima. Así que en lugar de eso, os dejo este vídeo. Ajo y agua :D

martes, 14 de junio de 2011

Hoy, examen de arte.

Espero tener suerte... y dejo este videoclip cortesía de la señorita Lezzzzzkaaaaa, del cual reconozco bastantes obras, lo que me llena de orgullo y satisfacción, xD.

sábado, 11 de junio de 2011

Más frikadas :D

Es que no se me ocurre qué más actualizar, y mi nivel de frikismo (que va siempre en una gráfica ascendente con curvas dependiendo de lo friki que esté el día concreto) está en un pico alto.
Así que os voy a enseñar estas perlitas que os encantarán, si es que no las conocéis. Ahí van :3



Y esta, a santo de la última película. Y porque Magneto mola. Y Green Lantern no porque puedo vencer a su yo pasado y presente con un lápiz amarillo.



La canción de hoy es, sin duda, "Rorschach and Deadpool".

viernes, 10 de junio de 2011

CANNOT BE UNSEEN.

Ya lo he puesto en el caralibro, pero es que me hizo demasiada gracia... Así que voy a seguir dando el coñazo por aquí. Así actualizo, de paso...

jueves, 2 de junio de 2011

Uno de diciembre.

Acabé por darme cuenta de que las fechas no importan. Que no necesito excusas para hacerte regalos ni para escribirte tonterías. Que los momentos más especiales incluyen abrazos en la estación y un viaje juntos en tren.

Que todos los días pueden ser uno de diciembre.

martes, 31 de mayo de 2011

Es... inquietante.



Os dejo el vídeo y punto.

jueves, 19 de mayo de 2011

Los días grises.

Pasaban los días. Rutina. Se levantaban, buenos días, desayunaban juntos, se duchaban- a veces juntos, a veces separados. Se iban al trabajo. Volvían cansados y se encontraban de nuevo, y hallaban en el sofá un ratito para disfrutar de la compañía del otro. Era una vida hastiada, pero feliz. Casi siempre.
En ocasiones, el gris de los días les podía. Entonces ya no se duchaban juntos, ni se decían buenos días, sólo los gruñían. Ni disfrutaban en el sofá de la compañía del otro. Se encerraban en una burbuja y soñaban lo que podría ser.

En una de esas ocasiones, él decidió enfrentarse al gris. Llenó una mochila de lo más esencial y se la echó al hombro. "¿Vienes?" le preguntó a ella. "Voy" respondió. Le había jurado mil veces que si él decía ven, ella iría. Decidió que entre sus cosas imprescindibles estaba la guitarra.

Apagaron las luces, cerraron las persianas y se marcharon a lo desconocido. Se dejaron los días grises en casa.

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Ya, sí, llevo mucho sin actualizar. Son estos días, que me drenan la imaginación y las ganas de escribir. Mierda de exámenes y trabajos y cosas. En verano (espero) volveré a la producción creativa. Pero still alive.



No sé si he puesto esta canción ya. Y qué, mola.

lunes, 4 de abril de 2011

Awareness.

Mañana me pongo a escribir sobre vuestras propuestas. Hoy toca post de publicidad.

Os vengo a hablar de un videojuego que está desarrollando un amigo, llamado Awareness. No os contaré mucho porque su página (que podéis encontrar pinchando en este enlace) está muy completita, pero sí os voy a pedir un favor.

Si tenéis facebook, haceos fans de su página y así les apoyáis para que el proyecto siga adelante. Porfi-porfita recubierto de nata.

Y tal. Gracias por la colaboración :D



Hablando de videojuegos, pues os dejo un temita de Silent Hill :3

miércoles, 30 de marzo de 2011

Propuesta.

Me apetece escribir algo, pero no tengo absolutamente ninguna idea. Así que, para la gente que lea esto, os voy a proponer una cosa: Decidme un tema (puede ser una palabra, una canción, una frase, lo que os apetezca) y yo escribiré algo sobre ello. Y si llega la inspiración, que me pille trabajando...

Por cierto, la señorita Katya (que parece rusa y tiene un nombre ruso pero no es rusa) me ha descubierto un nuevo grupo que quiero compartir con vosotros. Disfrutadlo ^^

lunes, 21 de marzo de 2011

El Raticate que murió por culpa tuya.

Lectores de mi blog, seguro que muchos habréis tenido una infancia pokémon. Sí, jugando a los tazos y a los juegos de la Gameboy. Pues bien, hoy, buscando leyendas urbanas de videojuegos (una, que es masoquista y gusta de acojonarse), he llegado a un blog que tenía el artículo que veréis a continuación...

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Pokémon red y blue no eran diferentes a sus sucesores sólo en el estilo y gráficos un poco más avanzados, era algo más que ver con el feeling en general lo que los separaba. La música vacía, las personas en un sólo lugar, haciendo nada, hablando consigo mismos, el ambiente hinóspito, poco vivo, inmaterial. Era difícil en ese entonces, en nuestra niñez, notar este tipo de cosas, detalles que dejamos pasar por alto que hoy en día pueden resultar perturbadores.

Si haces un poco de memoria problamente recuerdes uno de los pokémon usados por tu rival desde un inicio, un Raticate, que luego fuese sustituido por un Arcanine.
¿Sabes acaso el motivo de esto? Tú le mataste.

Antes de abordar el SS Anne tu rival te intercepta para retarte a una batalla pokémon. Cuando terminan, entre la confusión, tu rival jamás encontró tiempo para visitar un Centro Pokémon, viajando por ve tú a saber qué tiempo con su pokémon gravemente herido. Antes de llegar a tierra firme, Raticate muere.

Esto no viene a ser confirmado hasta los sucesos de Pueblo Lavanda, donde encuentras a tu rival frente a la tumba de un pokémon, llorando. Antes de retarte a duelo te provoca ¿tienes idea del dolor que representa ver morir a uno de tus pokémon?.
A partir de esto punto tu rival aparece cada vez más maduro, su música de batalla es cada vez más seria, sus palabras suenan más distantes, molestas quizá, no disfruta sus batallas, tampoco se alegra de sus vistorias. ¿Preguntas por qué? Porque mataste a su mejor amigo y pokémon favorito, arruinaste su funeral, dedicaste todo tu tiempo a perseguirle como un depredador, con la única intención de derrotarle y quitarle cualquier esperanza de victoria o de retribución hacía el pobre pokémon que tú electrocutaste, quemaste, envenenaste, congelaste o golpeaste hasta la muerte.
A pesar de todo, Gary jamás te culpa de la muerte de Raticate, en vez de eso, canaliza todo el rencor y el dolor en coraje y motivación para ser el campeón de la Liga Pokémon.

Lógicamente, a pesar de negárselo a si mismo, él te ve como responsable, como aquel que indirectmanete rompió su inocencia y su infancia, las consecuencias más inmediatas de la muerte de Raticate.

Todo esto se viene abajo cuando poco antes de alcanzar La Liga es derrotado por ti, decepcionando a su abuelo, que te felicita a ti, que te abraza a ti, que está orgulloso de ti.

Durante la historia del juego, mataste al mejor amigo de Gary, rompiste sus sueños y le robaste el cariño de su abuelo. Y a todo esto, Gary no tiene padres, es huérfano.

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Llorad. ¡MWAHAHAHAHAHA!

Fuente: http://www.pikabit.net/2010/07/pokemon-mindfucks-gary-y-pueblo-lavanda/

miércoles, 16 de marzo de 2011

El suicidio de la patata.

Literalmente.

jueves, 10 de marzo de 2011

Somos productivos entre clases...








Y sí, esto es el resultado de tener un programa de hacer fotos divertidas en el portátil, una webcam y tiempo libre entre clases.
Pero desde luego, la mejor foto es esta, digna de una viñeta de "The Walking Dead":



En fin, os dejo con una cancioncilla a la sazón de estas fotos:

martes, 8 de marzo de 2011

Pío, pío...

Me pasa bastante a menudo que se me ocurre algo (un pensamiento corto, una frase) y quiero expresarlo públicamente, pero es tan breve que me parece absurdo dedicarle una entrada de blog.

Así que se me ha ocurrido hacerme un twitter. A ver qué pasa. Ya lo intenté con el tuenti y duré tres meses... Pues eso. En breve veréis un pajarito piando por estos lares.

miércoles, 2 de marzo de 2011

Formas de percibir la realidad I

La realidad tiene la horrible costumbre de ser bastante perra. En mayor o menor medida, pero suele ser perra. Yo, como defensora acérrima de los derechos del soñador, me propuse combatir su perrería con imaginación, desarrollando diversas técnicas para hacerla un poco más... especial. Diría dulce, diría amable, diría agradable, pero no. La palabra es especial, hacer la realidad única, modelarla según nuestros más descabellados pensamientos.

Y bueno, el primer instrumento que necesitaremos para conseguir esto es un mp3/mp4/walkman/discman/móvil/cualquier cosa de la que salga música, y la banda sonora de algún videojuego grabada en ella. Yo personalmente suelo utilizar esta:



Carga el ambiente de epicidad. Y caminar por la calle sintiéndote la heroína (o el héroe) de una gran aventura... no tiene precio.

Bueno, ahí lo dejo. Ya escribiré más de estas.

sábado, 26 de febrero de 2011

Cosas que no entiendo.

¿Cómo alguien que sabe hacer esto:



se dedica a hacer esto habitualmente?:



De verdad que no le veo el sentido. Asco de industria musical.

jueves, 17 de febrero de 2011

Epicness is epic.







Creo que me voy a pasar diciendo "DANANAH-DANANAH-DAH-NAH-NAH" y "Diddlydiddlydiddlydiddly-bam-bam-bam" los próximos tres meses...

jueves, 10 de febrero de 2011

Los sonacirema.

Toda cultura tiene sus propias pautas de comportamiento, que resultan extrañas para aquellos que proceden de otro ámbito cultural. Podemos tomar como ejemplo a los sonacirema, grupo descrito en una célebre investigación de Horace Miner (1956). Este autor centró su atención en los elaborados rituales corporales en los que participan los sonacirema, rituales que tienen extrañas y exóticas características. Su descripción merece ser citada en toda su extensión:
La creencia fundamental que subyace en todo el sistema parece ser que el cuerpo humano es feo y que por naturaleza tiende a debilitarse y a enfermar. Encarcelado en este cuerpo, la única esperanza del hombre es poder apartarse de estas tendencias mediante el uso de las poderosas influencias del ritual y de la ceremonia. Cada hogar tiene uno o más altares dedicados a este fin [ ... ]. El lugar central del altar lo ocupa una caja o cofre construido en la pared. En este cofre se guardan los numerosos amuletos y pociones mágicas sin los que ningún nativo cree que podría sobrevivir. Estos preparados los garantizan diversos especialistas. Los más poderosos son los curanderos, cuya asistencia debe recompensarse con cuantiosos regalos. Sin embargo, los curanderos no proporcionan las pociones curativas a sus clientes sino que deciden sobre los ingredientes y luego los escriben en una lengua antigua y secreta. Esta escritura la comprenden únicamente ellos y los herbolarios, quienes, a cambio
de otro regalo, proporcionan los amuletos necesarios (... ).
Los sonacirema sienten al mismo tiempo un horror casi patológico y una gran fascinación por la boca, cuyo estado piensan que tiene una influencia sobrenatural en todas las relaciones sociales. Creen que, si no fuera por los rituales bucales, se les caerían los dientes, sangrarían sus encías, sus mandíbulas se reducirían, sus amigos les abandonarían y serían rechazados por sus amantes.
También creen que existe una estrecha relación entre las características orales y las morales. Por ejemplo, hay una ablución ritual de la boca de los niños que se supone mejora su carácter moral.
El ritual corporal cotidiano general incluye un rito bucal. Aparte de la minuciosidad en el cuidado de la boca, este rito conlleva una práctica que resulta repulsiva para el no iniciado. Me contaron que el ritual consiste en insertar un pequeño haz de pelos de cerdo en la boca, junto con ciertos polvos mágicos, y en moverlo con una serie de gestos muy formales.

¿Quiénes son los sonacirema y en qué parte del mundo viven? Usted mismo podrá responder a esta pregunta e identificar la naturaleza de los rituales corporales descritos, leyendo simplemente "sonacirema" al revés.


Este es un extracto del manual de sociología de Giddens. Lo leí el otro día, estudiando, y me pareció bastante interesante. Es curioso ver nuestra propia sociedad a través de los ojos de un extraño, ¿verdad?



¿Y la canción a cuento de qué viene? Pues a cuento de que hoy me he terminado el libro en el que se basa la película. Genial, por cierto. "Capitán de mar y guerra", de Patrick O'Brian. Muy recomendable, aunque está tan saturado de términos navales que si os animáis, va a costar un poquito leerlo.

sábado, 5 de febrero de 2011

Extremistas.

Adoro a los extremistas. Son TAN divertidos. Supongo que es por este carácter mío, unos lo llaman pasota, yo lo llamo tranquilo... el caso es que cuando me encuentro con un extremista no puedo evitar tomarme sus férreas afirmaciones como un chiste.

Hoy el señor trasgo me ha descubierto a Jack T. Chick, un dibujante de cómics que ha llevado sus creencias (el protestantismo) al límite. No tiene precio. Afirma cosas como que los dinosaurios murieron porque tras el diluvio universal no había oxígeno suficiente para ellos (es que eran muy grandes), o que jugar a juegos de rol (Dungeons & Dragons en concreto) te afecta seriamente a la vida. Te suicidas si tu pj muere, y aprendes a hacer hechizos DE VERDAD.

Me he pasado un buen rato leyendo los cómics de este tío... la verdad es que no tienen desperdicio. Eso sí, si os enfadáis con facilidad, mejor ni lo intentéis. Sólo apto para personas con mucho sentido del humor.

Aquí tenéis todos los cómics.

Y ahora, unrelated song:

lunes, 24 de enero de 2011

Aclaremos las cosas.

Vale, a los que hayáis visto la entrada anterior, os he debido dar un buen susto... Era una broma *pausa para el suspiro general de alivio*. Es una animación de un señor llamado Harry Partridge que está muy mal de la cabeza, como habéis podido observar. Lo suficientemente mal como para hacer cosas como esta:



Y con esto y una tostada, hasta la próxima entrada u_u

Perlitas que descubre una...



La intro de la serie de dibujos animados de Watchmen. LLORAD. Aquí la letra, para quien, como yo, se lo pase pipa con estas cosas:

Strong together, united forever
They're the best of friends

But when troubles about, you'd best watch out
For the Watchmen!

Nite Owl is their leader
And he loves to party down

Rorschach's friends to the animals...

"Yeah, when he's not clowning around"

"I'm nutty!"

Beat up some thugs, say no to drugs
Be in bed by 10

But if troubles about, you'd best watch out
For the Watchmen!

Silk Spectres a sensation
You should really never miss

The Comedian's her biggest fan now...

"If I could only get that kiss!"

Ozy and Bubastis - a couple o'
Crimesolving superstars

Jon can give you cancer
and he'll turn into a car


Strong together, united forever
Come and meet your friends

Have no fear, times up, times here
For the Watchmen!

WATCH OUT!

jueves, 20 de enero de 2011

Fields of gold.

1. Negación.

-No le voy a engañar- dijo el oncólogo, impasible. A fuerza de enfrentarse a esa situación innumerables veces, había desarrollado algún tipo de defensa, la extraña capacidad de mirar a sus destrozados pacientes desde la lejanía. Un escudo que impedía sentirse culpable por algo que, al fin y al cabo, no era culpa suya. -Hemos encontrado el cáncer en un estado muy avanzado, y es casi imposible encontrar un donante a tiempo. Pero lo intentaremos.

Él se marchó de la consulta sin mediar palabra, con la mirada perdida. Su mente se resistía a aceptar lo que su cuerpo sabía desde hace meses. Estuvo dando vueltas una hora, quizá dos, porque no tenía nada que hacer y porque algo le impedía llegar a casa. Quizá porque en el fondo era consciente de que necesitaba tiempo en soledad.
Cuando llegó a casa, ella le recibió con los brazos abiertos, sonriendo. La sonrisa se le esfumó en cuanto vio la expresión del recién llegado.

-¿Qué tal el médico?-preguntó con voz suave. Él no respondía. Se sentaron en el sillón. Durante unos minutos, todo lo que se oía en la sala era el tic-tac del reloj.

-Cáncer- dijo finalmente. Y de nuevo el tic-tac del reloj.

Los días siguientes fueron duros para ambos. Él no quería hablar de ello, y cuando lo hacía, enseguida cambiaba de tema. Como si no pasase nada. Ella intentaba no recordárselo y no molestarle, pero lloraba por las noches.

2. Ira.

Aunque los silencios fueron duros, ella hubiera dado lo que fuera por recuperarlos tras unas semanas. Seguramente él también, si no hubiera estado tan ocupado gritando a todo el mundo. Sin escuchar a nadie.
Ella también quería gritarle, quería decirle que no era fácil para ninguno, pero que tenían que seguir adelante juntos. Pero se callaba, porque tenía miedo de discutir demasiado y de que todo se rompiese, y no quería dejarle solo. “Si nos queda poco tiempo juntos” pensaba entre lágrimas “tendré que estar a su lado, pase lo que pase”. Así que pese a los gritos, los platos y vasos rotos y el llanto, ella no se rendía.
El peor momento fue cuando le levantó la mano. No fue una bofetada muy fuerte, ni siquiera le dolió, pero ambos lo lamentaron durante días. Seguramente, fue entonces cuando él se dio cuenta de lo que le estaba haciendo a todo el mundo, y de que era hora de cambiar su actitud.

3. Pacto.

Y por fin, asumió lo que le ocurría. Pero no las consecuencias. Durante dos semanas, más o menos, se estuvo metiendo en los barrios más oscuros de la ciudad en busca de curanderas y remedios milagrosos, además de la quimioterapia prescrita. Por supuesto, no le dijo nada a ella. En cierto modo, le daba vergüenza. En cierto modo, sabía que lo que hacía no servía de nada.
Aún así, tomó todo tipo de hierbas y se sometió a todo tipo de rituales. Si no le curaba, tal vez le alargase la vida. Tenía tanto por hacer, tanto que arreglar... le debía tantas cosas a ella. Se habían prometido viajes, aventuras y una familia. Se habían prometido una vida juntos y la suya se apagaba.
Cuando hubo visitado al último “mago” de la ciudad y no había nada más que probar, aceptó la verdad. Tendría que empezar a despedirse.

4. Depresión.


Se miró al espejo. Ya prácticamente no tenía pelo y se le notaban las costillas. Las ojeras casi negras destacaban sobre la piel pálida. Al día siguiente iría al hospital a que le ingresaran, apenas podía moverse por sí solo. Se sentía una carga para ella, que tenía que ayudarle para todo, un trasto inútil que le impedía a la persona que más quería ser feliz. Y ella... ella le sonreía. Aunque estaba agotada, aunque tenía que trabajar durante nueve o diez horas y luego al llegar a casa tenía que cuidarle, siempre tenía una sonrisa preparada para él. Cómo iba a echar de menos esa sonrisa...

Cuando le ingresaron, ella se esforzó muchísimo para no llorar. Él sí lloraba, lloraba mucho. Lloraba por todas las cosas que se iba a perder. Aparte de eso, no hablaba demasiado. Apático y oscuro, miraba al infinito, cavilando sobre cosas que no le contaba. Sus amigos le visitaron los primeros días, pero pronto se cansaron. Él había sido antaño simpático y vital. La enfermedad le había cambiado por completo, y al final, solo ella iba a visitarle. A veces pasaba las noches en el hospital. Muchas veces le despertaban los gritos de él. Entonces le abrazaba y le recordaba que sólo había sido un sueño. Y se mordía los labios, cerrando los ojos con fuerza.

5. Aceptación.

Un día se despertó y se dio cuenta de que ya no tenía más lágrimas. A esas alturas pasaba mucho más tiempo dormido que despierto, entre los sedantes y la fatiga constante. Lo bueno era que siempre que despertaba -aunque fuesen unos minutos y le pareciese casi un sueño- ella estaba ahí.
Los pocos momentos lúcidos que tenía, cuando no estaba hasta arriba de morfina y el dolor era soportable, charlaban. Fueron días plácidos para ambos. La tormenta había pasado, ya solo quedaba la calma.

-¿Sabes?- dijo él un día, mirándola con cariño.- Creo que durante todo este tiempo, no he tenido miedo a la muerte.

Ella le miró sin entender.

-No... lo que realmente me daba miedo es dejarte atrás. Creo que es lo único que me duele de verdad de todo esto. Metafóricamente hablando, claro- rió débilmente. Ella se sentó junto a él y le acarició la mejilla, silenciosa. Se había acostumbrado, como él, a no hablar demasiado. Tampoco es que hubiese demasiado que decir.

-Prométeme que serás feliz. Que seguirás adelante. Si puedes prometerme eso... supongo que me iré en paz.

Eso fue demasiado para ella. Todas las lágrimas que había estado conteniendo durante todos esos meses salieron de golpe, y se derrumbó en la cama sollozando. Él la abrazó torpemente, con toda la fuerza que su malogrado cuerpo le permitía. Se quedaron dormidos así.

Pocos días después él no volvió a despertar. Y ella... bueno, ella cumplió su promesa. Todo lo bien que pudo. Y cada año, visitaba el cementerio y le regalaba una flor y una sonrisa.

miércoles, 12 de enero de 2011

Fidechichas a la japonesa.

Sí, ya era hora de que alguna otra receta acompañase a la solitaria tarta de queso para dos en el apartado gastronomía... Así que os voy a contar lo que me he hecho de cena.

Los que visitéis con asiduidad Cuánta Razón o Desmotivaciones.es seguramente ya sepáis lo que son las fidechichas. Los que no, no os preocupéis, porque de nuevo, adjunto una imagen:



Y aquí la receta.

¿Qué vamos a necesitar?

-Una olla grande (en serio, la más grande que tengas en casa)
-Una olla más pequeñita
-Agua
-Espaguetis
-Salchichas
-Cebolla frita
-Salsa de soja
-Cubitos avecrem (o similar)
-Orégano
-Ajo en polvo

Y ahora, al lío.

Bueno, como es evidente, yo me lo he preparado para mí solita, así que la receta es para una sola persona... si queréis para más, a multiplicar.

Primero, llenad la olla grande de agua y ponedla a hervir, y mientras esperáis, toca preparar las fidechichas. Para prepararlas, cortad las salchichas que queráis por la mitad (yo corté dos) y empezad a insertar espaguetis enteros en ellas. Sí, sí, como lo leéis, atravesad inmisericordemente las salchichas con espaguetis. Yo utilicé quince, pero eso depende de vuestras ganas de comer espaguetis/fideos y de vuestra destreza manual.
Cuando el agua ya hierva y tengáis las fidechichas preparadas, metedlas en el agua con un poco de sal. La técnica es igual a la de hacer espaguetis: Esperad a que se reblandezcan hasta que os guste.

La sopa que acompaña a las fidechichas se hace con un tercio de cubito avecrem y se adereza con salsa de soja y hierbas variadas (yo pongo orégano y ajo en polvo). El aderezo va al gusto. También le añado cebolla frita, que mi madre compra en Ikea pero se puede hacer con una sartén.

Cuando tenemos las fidechichas y la sopa hechas, lo mezclamos bien todo y... ¡a comer! Que os aproveche :3

lunes, 10 de enero de 2011

10 de Enero.

Dum, dum, duum... Dum, dum, dum-duuum...

Las primeras notas del bajo de Birdland me despiertan, apago el despertador del móvil. Son las siete y doce minutos de la mañana, y para levantarme casi tengo que rodar y caer de la cama.

Ya duchada y despejada, salgo a la calle. Se rumorea que los días han empezado a ser más largos, pero yo no me lo creo y tampoco me disgusta. El cielo , aún nocturno, está pintado de azul cobalto, por el este empieza a clarear. Las pocas estrellas que brillan lo suficientemente fuerte como para escapar a la contaminación siguen orgullosas en lo alto del cielo. Un poco más abajo, brillando como ningún otro lucero, está Venus.
El panorama general tiene un poco de mágico. Misterio, silencio y noche.

En el autobús no me siento con ánimos de enfrentarme a Aubrey y Maturin y sus términos navales, así que música y a cerrar los ojos. Un suave bajo, un piano y una voz cálida que sustituye pobremente tus abrazos. Pienso en lo bonito que sería que la rutina tuviese un poco de ti.

Luego llegan las clases, la organización de trabajos, el estrés... Y menos mal que hay buenas noticias, porque si no, empezaría a pensar que el 10 de Enero tiene algo contra mí.

sábado, 8 de enero de 2011

Objetos frágiles.

El otro día estaba en el supermercado, haciendo la compra con el señor trasgo, y vi un libro junto a la caja. Me llamó la atención porque el autor era Neil Gaiman, un escritor y guionista de cómics que descubrí hace poco y que, francamente, me encanta. Así que me lo compré. Y menos mal.

"Objetos frágiles", que así se llama, es una compilación de algunos cuentos del escritor. Esos cuentos, como podréis apreciar todos los que hayáis leído Sandman o hayáis visto Los Mundos de Coraline, tienen lo fantástico y lo oscuro de los cuentos de hadas de antes, los de los Hermanos Grimm y Anderson, entre otros. Son cuentos extraños, muy diferentes entre sí, que te hacen -al menos a mí- mirar la vida con otros ojos.
No invitan a la reflexión profunda, sino que más bien te hacen preguntarte cuánto de cierto tendrán los mitos y leyendas. Si la mujer que viste en el tren de nariz ganchuda y gesto arisco era realmente una bruja y si la sombra que a veces percibes por el rabillo del ojo existirá o no.

En el libro aparecen personajes conocidos, como Sherlock Holmes o Arlequín, y también personajes inventados, como Sombra o el Señor Alice. Todos ellos geniales.

Después de haber leído unas cuantas obras de Neil Gaiman, es hora de recomendar no solo este, sino cualquier libro o cómic que encontréis del autor, porque seguramente no os arrepentiréis de la adquisición. En serio.



Las voces de niños tienen algo siniestro...

Por cierto, a los que puedan, el libro mentado está ya disponible en las bibliotecas de Indy u_u Por si os apetece cogerlo.

sábado, 1 de enero de 2011

Aprovechando...

...que acabo de llegar a casa (lo sé, es pronto) y que estoy más o menos consciente, voy a poner el primer post del año. A duras penas, que no paro de confundir letras.

Feliz año, feliz vida y feliz loqueseaqueosapetezca.

Saludos a todos los que lean este chorrapost u_u



¿Por qué esta canción? Pues... por ejemplo.