martes, 30 de junio de 2009

La maldición de los soñadores.

—Yo soy ardiente, yo soy morena,
yo soy el símbolo de la pasión,
de ansia de goces mi alma está llena.
¿A mí me buscas?

—No es a ti, no.

—Mi frente es pálida, mis trenzas de oro,
puedo brindarte dichas sin fin.
Yo de ternura guardo un tesoro.
¿A mí me llamas?

—No, no es a ti.

—Yo soy un sueño, un imposible,
vano fantasma de niebla y luz.
Soy incorpórea, soy intangible,
no puedo amarte.

—¡Oh ven, ven tú!



G.A. Bécquer

Basta con tener un espíritu libre, basta con que las musas te visiten de vez en cuando. Basta con ser un soñador, un bohemio, un artista, para que ocurra. Es una especie de maldición que no perdona a nadie.

Perseguimos, como Manrique, un rayo de luna. Tendemos a enamorarnos de quimeras, de sueños imposibles. Jamás estamos satisfechos con lo que ya tenemos, siempre queremos algo más. Saltamos de un lugar a otro, rozándolo apenas con la punta de los dedos, porque nunca es suficiente. Sólo lo inalcanzable nos parece bueno para nosotros, y si lo podemos alcanzar pierde todo interés.

Quisiera dejar de amar a la Luna, quisiera dejar de querer besar al Sol. Quisiera que el cielo no me llamase a sus puertas susurrando, quisiera poder vivir con los pies en suelo... pero no puedo.

¿Y aún preguntas por qué no dejo de suspirar?

1 exploradores comentan...:

Vainilla dijo...

Es lo que nos toca, cariño... Somos soñadoras, bohemias (¿embusteras? xD), artistas, escritoras... pero, ¿y lo felices que somos siendo así? Yo creo que lo más importante no es decir que nos gustaría abandonar nuestros sueños, porque sin sueños nosotros no seríamos nada (sin una meta que alcanzar, ¿qué sería del hombre? No estancaríamos más de lo que ya estamos, si no el hecho de saber que con nuestros sueños nosotros somos felices con cómo somos.

Si eres feliz, ¿qué más da que seas un soñador, optimista, pesimista, realista o lo que sea? Lo importante es de felicidad.

Te quiero n.n

P.D.: Me encantó tu entrada... como todas *O*