miércoles, 1 de octubre de 2008

¿Orientación profesional?


Esta foto que pongo como portada viene a ser un cartel de la conocida tienda H&M. No es ningún fotomontaje, y probablemente fuera una errata, pero da pie a pensar muchas cosas. Si no fuera porque el término "puta" sigue siendo degradante, los "pantalones de putilla" podrían ponerse de moda el año que viene. Con todas las letras.
Y esque hoy por hoy, si con 18 años eres virgen ya eres un bicho raro. Y no hablemos si además, lo eres por voluntad propia. No esque sea una fanática hiperconservadora ni nada por el estilo, pero... ¿No creéis que la sociedad es demasiado liberal?
En serio, no sé a vosotros, pero a mi no me parece ni medio bien que la virginidad se haya hecho algo casi vergonzoso, y que las niñatas y niñatos que no tienen ni puta idea de cómo es la vida se apresuren a perderla, no vaya a ser que se queden los últimos. En las series ponen a crías de dieciséis años montándoselo con tíos de treinta, alumnos con profesores, algunos una noche con una y otra con otra... Como si fuera lo más normal del mundo. Perdón, me disculparéis, he usado un condicional. Hoy por hoy, lo es. El sexo es lo que vende, pero no te dicen las consecuencias. Parece que puedas echar un polvo, y después otro, y después otro, sin que ocurra nada. Y no es así.
Hacer el amor puede ser una de las experiencias más bellas de tu vida o una de las más horrorosas. Lo que nunca varía es que cada vez que lo haces, cambias. Un poco al menos. A veces puede ser un cambio enorme, como quedarte embarazada, o contraer el sida. A veces simplemente un arrepentimiento profundo. A veces la certeza de que la persona con la que acabas de estar es aquella con la que quieres estar para siempre. A veces, un cambio tan sutil que casi no se nota.
Eso cuando haces el amor. Aunque ahora, el 80% de las personas sexualmente activas (y con esto me refiero a que practican el sexo cuando pueden) no hacen el amor: follan.
Y esto, señores, no está bien. Os explicaré la diferencia, por si no acabáis de entenderlo:
Hacer el amor es un acto de alma y cuerpo, entregas tu cuerpo a la persona a la que ya has entregado tu alma. Y se lo entregas porque es para traspasar la última barrera, para estar unidos a un nivel superior, más allá de todo lo imaginable. Y si no se lo entregas junto con tu alma, entonces, y si tenías la intención de hacer el amor te darás cuenta, dolerá. No físicamente, sino en el alma. Dolerá.
Follar es un acto puramente carnal, donde se busca el placer por el placer (como dice el anuncio de Schweppes), donde no buscas la satisfacción plena sino la animal. No digo que esté mal, somos animales y tenemos instintos, pero no es bueno tomarlo por costumbre. Si no sabes llevarlo, al final te rompe. Y si no te rompe... es que nunca llegaste a estar entero.
Así que, en nombre de todos los niños que no han nacido porque fueron producto de un desliz, en nombre de todas las personas que mantienen su virginidad porque comprenden el concepto de hacer el amor, en nombre de vosotros mismos y de mí la primera, os digo: Sed valientes e id más allá. Dejad lo físico, buscad la unión perfecta. No dejéis que la sociedad os obligue a follar, y atreveos a hacer el amor.
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Ella misma te lo ha dicho. Es tuya si quieres.
Su cuerpo no. Deseo su cuerpo.
Tienes su alma. El alma es lo único que importa. La suya es tuya, y la tuya suya. El alma es la base. Los placeres del cuerpo no significarían nada sin ella, y los placeres del alma siempre tienen significado. Con el alma podéis haceros felices mutuamente, y más que felices. Podéis reír. Podéis soñar. Podéis, incluso, llorar. Su alma siempre estará a tu lado, y siempre podrás sentirla. Saber que es tuya, y gritar extasiado que tú también le perteneces.
Eso es verdad, pero quiero su cuerpo. Quiero besarla. Quiero acariciarla... Quiero perderme en sus curvas.
El cuerpo siempre es secundario, pero comprendo tus deseos. Piensa en que la tendrás, la besarás y la acariciarás. Podrás aprender cada rincón de su cuerpo. Tarde o temprano. Y entonces seréis plenamente felices, porque las almas se habrán reunido con sus vehículos. Hasta entonces piensa en la esencia.
Esperaré.

3 exploradores comentan...:

Isiriel dijo...

Dios que risa, pantalones de putilla? Sospecho que eso no fue solo un desliz (mm) quien sabe.
Por cierto, la imagen de al lado, magnífica, me encanta, aunque no sé de donde la has sacado.
Y añadir que la gente es gilipollas, porque lo es, por todo, por no tener conciencia propia para darse cuenta de que cada vez que "folla" se le cae el alma a trozos y deja de ser una persona pasando a ser un simple animal.

PD: Mi ejército aliado --> gente de foros que tb escriben.
PDD: que pasa que no puedo tener más visitas que tu ¬¬ (me siento discriminada u_u) xDDD
PDDD: no lo sé, supongo que porque trasteo mucho en el blog o porque en vez de poner el reproductor media pongo la lista de reproducción del blog

Kangrejo dijo...

Tienes toda la razón... Así de triste es la cosa.

Caronte dijo...

Tienes toda la razón, se ha banalizado tanto el sexo por culpa de este hedonismo compulsivo tan del primer mundo que lo que puede ser (espero) una experiencia más espiritual que física se ha reducido al cuerpo y que de ahí no salga.

Y lo dice alguien que ha follado y nunca ha hecho el amor. Pero no me rindo, sigo buscando XD